Dice Juan Antonio Gómez Barrera que la primera palabra que aprende a pronunciar un soriano es "Valonsadero". Pero, ¿qué es Valonsadero?
Parece que la etimología remite a "Alfonso". Es posible que la reunión de partidarios del rey Alfonso VIII se conociera como "alfonsada" o "alfonsadero". En cualquier caso, no parece demasiado claro. No importa, la duda no le resta un ápice de interés, si acaso se lo aumenta.
Valonsadero es el parque de los sorianos y el lugar de la "Saca" durante la "Sanjuanada". Desde allí, con garrochistas y mansos, se mueven doce toros hasta el coso de Soria. Estas fiestas, de enorme carga antropológica, tienen aquí su más acendrado rito.
La preciosa dehesa es un espacio en el que las afloraciones de areniscas conforman un laberinto de abrigos con pinturas rupestres. Con unas secuencias, verdaderamente, narrativas.
Hay lugares que por su belleza, su aire, su horizonte, desprenden una gracia especial. Valonsadero es uno de ellos, o al menos a mí me lo parece.
Esta mañana hemos tenido la oportunidad de conocer el último abrigo que se ha descubierto. El último de un censo de 36. Parecen muchos, pero según nos comentaba Juan Antonio Gómez Barrera, Valonsadero operó como cantera de Soria durante siglos. En su opinión, el 80% del arte allí plasmado está ahora en sillares de casas nobles y canonjías. Cosas que pasan.
Las manos positivas registradas sobre la pared de este nuevo abrigo son pequeñas y delicadas. Sin duda de un niño o de una niña de 8 o 10 años. Quizás, de menos edad. Estas manos en una cronología - entre neolítica y de la Edad del Cobre - no son frecuentes y acrecientan el interés por visitar este santuario pictórico - lugar de agregación - en el que pueden verse desde animales imaginarios hasta caballos, toros o chamanes (jefes) con sus bastones de mando.
El día ha sido completo. Había empezado viendo en la tele como un judoka caía "dormido". Yo pensaba que estaba muerto y me he dado un buen susto, a pesar de que la presentadora de la tele decía que era algo frecuente. Se ve que sigo poco el judo.
Por la tarde hemos tenido una noticia de calado en el mundo de la paleoantropología: en una cantera de Casablanca, en la costa occidental de Marruecos, se han recuperado industrias achelenses de 1,6 millones de años. Las de Orce, las más antiguas de Europa, están datadas en 1,4 y muy cerca las de la Sima del Elefante en Atapuerca. Esto vuelve a poner el foco sobre el Estrecho de Gibraltar. El tiempo y las pruebas dirán, pero esas antigüedades, muy cercanas a las de África Oriental para el achelense, nos obligan a cambiar las perspectivas.
Mañana, partimos hacia Siega Verde. Seguimos con el rodaje:
Manuel Navarro